Aunque todas las personas, tenemos derecho a hacer uso de la variedad lingüística que nos es propia, lo cierto es que la sociedad en donde vivimos discrimina algunos usos lingüísticos. Esa cuestión es resultado de que la sociedad es altamente discriminadora. No aceptamos lo que no se nos parece, no queremos lo que se ve diferente, y mucho menos los trataremos como quisieramos que se nos trate.
La discriminación lingüística es una de las tantas formas de exclusión que existen en la sociedad, al lado de la discriminación por la raza, el genero, la cultura, o el nivel socioeconómico, esta situación se debe a que los grupos que tiene el poder económico y político imponen sus ideas y costumbres es decir su cultura como única, valida y legitima en la sociedad, de esta manera las manifestaciones culturales que son diferentes son juzgadas negativamente.
La discriminación lingüística es una de las tantas formas de exclusión que existen en la sociedad, al lado de la discriminación por la raza, el genero, la cultura, o el nivel socioeconómico, esta situación se debe a que los grupos que tiene el poder económico y político imponen sus ideas y costumbres es decir su cultura como única, valida y legitima en la sociedad, de esta manera las manifestaciones culturales que son diferentes son juzgadas negativamente.
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La existencia de una variedad de castellano estándar en el Perú muestra que hay un sector en la población, una elite letrada, que impone una manera de hablar como la correcta, la superior, la más normal y relega a las otras variedades como las "incorrectas", de gente inculta, "ignorantes", cuando en realidad sólo se trata de decir que son diferentes.
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